¿Te has dado cuenta que hay un gran problema actualmente con la tecnología? No sólo estoy hablando de los teléfonos móviles, sino de la televisión y nuestras computadoras. Parece que ahora estamos pegados a la tecnología y muchas veces si estamos lejos del Internet sentimos desesperación o angustia. Si este es tu caso, es probable que hayas empezado a desarrollar una adicción a ella, por lo que es muy recomendable empezar a poner límites y regresar a disfrutar tu vida, ser consciente de lo que sucede a tu alrededor y a prestar atención (real atención) a la vida misma.
No creas que odio la tecnología, al contrario la verdad es que creo que es una de las grandes herramientas que tenemos hoy en día, que nos permite acercarnos a nuestra familia que se encuentra lejos, a los amigos y a conocer gente que a lo mejor no está cerca de nosotors, y hasta realizar nuestras tareas laborales y aprender muchas cosas. Pero también creo que hoy en día hay una tendencia por dejarnos llevar por ella, en lugar de utilizarla como herramienta, la herramienta nos está utilizando.
Es decir, todo circula alrededor de la tecnología, si no tenemos Internet tenemos la desesperación de conectarnos, lo primero que hacemos cuando despertamos es tomar el teléfono y visitar las redes sociales. Bueno mucha gente ahora se ha vuelto adicta a tomarse selfies en cada paso de su vida, de lo que come, de lo que viste y de cuando hace ejercicio. No digo que estás cosas estén mal, lo que está mal es que no podamos vivir y disfrutar nuestra vida por estar pegados al teléfono, computadora o televisión.
Cuando dejamos que la tecnología maneje nuestra vidas, nos estamos dejando vivir inconscientemente. Es decir, no prestamos atención a lo que sucede a nuestro alrededor, aun cuando estamos cerca de nuestras personas queridas, realmente no lo estamos pues no les prestamos atención. Desaprovechamos oportunidades, nos quejamos constantemente de la falta de tiempo, le echamos la culpa a alguien más porque no disfrutamos la vida, etcétera. Pero no nos damos cuenta que estamos desaprovechando nuestra vida, la oportunidad de vivir y de cambiar nuestros hábitos para lograr la vida que queremos.
¿Cómo saber si eres adicto a la tecnología?
Debes de saber que hay varios tipos de adicciones a la tecnología, la hay a la computadora, a la televisión, al Internet o a las redes sociales. Aun cuando no se ha determinado oficialmente de que forma se presenta un desorden en cuanto a la tecnología, lo que los terapeutas dicen es que en general una persona que es adicta a la tecnología presenta lo siguientes comportamientos:
- Se te va el tiempo usando la tecnología. Lo cierto es que a todos nos ha pasado que ni nos damos cuenta y ya hemos pasado un buen tiempo en el Facebook, o Instagram. Pero a lo que se refiere cuando es una adicción es que pierdes toda noción de tiempo cuando te encuentras ahí.
- Te alejas de la gente o tiendes a aislarte. Prefieres estar viendo la televisión, pasando horas en Internet o en tu red social favorita que estar con tus amigos o familiares.
- Tienes consecuencias negativas en tus relaciones personales o en tu trabajo. Esto es ya la gente que está a tu alrededor se da cuenta que no estás al 100% presente y esto se ve reflejado en tu desempeño y en tu interacción con los demás.
- Tu tolerancia a la tecnología es mucho más alta. Es decir, requieres ya de otras cosas que satisfagan tu gusto por la tecnología, los videojuegos no son suficientes, el Internet no es suficiente, o las redes sociales no son suficiente para satisfacerte y andas en búsqueda de algo más.
Tal vez no seas adicto a la tecnología, pero de vez en cuando no nos caería nada mal resetear un poco nuestra dependencia con ella y tratar de utilizarla un poco menos. Por lo que a continuación te presento una estrategia que te ayudará a poner límites en el uso de tencología y te ayudará a enfocarte un poco más en otras cosas de tu vida.
Cómo limitar la tecnología y disfrutar más tu vida
1. Date cuenta si la tecnología está abarcando gran parte de tu vida
Comienza a percatarte si estás pasando demasiado tiempo en redes sociales o viendo la televisión, aun cuando ya no tienes nada interesante que ver, sigues en ellas. Piensa si eres de las personas que al recibir un mensaje tienen que responder inmediatamente, no me refiero a un mensaje de texto que vaya dirigido exclusivamente para ti, sino de esas alertas que recibes en Facebook, Instagram o cualquier otra red social en la que participes.
Piensa realmente que haces en tus ratos libres, te dedicas tiempo a tu desarrollo personal, lees libros, te das el cuidado necesario o simplemente estás pasando el tiempo en Instagram, Twitter, Reddit, Youtube, Netflix, Facebook, Messenger/Whatsapp . Revisa cuánto tiempo estás dedicando a pasar frente al televisor o computadora (fuera de las horas de trabajo) o específicamente en redes sociales y apps de mensajes.
2. ¿Estás a gusto con la cantidad de tiempo que le dedicas a la tecnología?
Pregúntate si en este momento estás a gusto con la cantidad de tiempo que pasas en redes sociales o en tu teléfono. Analiza si estás haciendo algo por ti mismo, si estás alcanzando tus metas o si estás cumpliendo tus sueños. Si la respuesta es no, pregúntate qué te lo impide, ¿la falta de tiempo? ¿la falta de interés? ¿o tu compromiso?
Ahora analiza que pasaría si pasaras menos tiempo en línea o leyendo cosas que no te ayudan a ser mejor o a construir la vida de tus sueños. ¿Qué pasaría si estuvieras más presente, más conectado con la gente a tu alrededor, más enfocado en lograr tus metas y lo que deseas de tu vida? Visualiza un poco en qué tipo de vida es la que realmente quiere vivir, qué tipo de persona quieres ser. ¿Te das cuenta que el dedicar un poco de menos tiempo a la tecnología puede traerte grandes beneficios?
3. Establece límites apropiados
Ahora que ya has establecido que sí quieres hacer un cambio y que deseas pasar menos tiempo en las redes sociales, es importante que determines en dónde estás pasando la mayor parte de tu tiempo, tal vez es Instagram, tal vez es Netflix. Lo que sigue es que establecer un límite apropiado, a lo mejor es borrar la app de tu teléfono, la otra puede ser no ver el teléfono o esa app durante horas de trabajo, otro más es no pasar tiempo en Internet después de las 8pm.
Por supuesto, esto es un pequeño ejemplo, lo que tú debes hacer es elegir en base a tus necesidades y a lo que quieres cambiar cuál es tu límite. Como te lo he mencionado anteriormente, es importante que si vas a realizar un cambio lo hagas poco a poco, de lo contrario lo que generas es ansiedad y a que tu decisión no sea permanente. Trata de utilizar la estrategia de los mini hábitos y haz un cambio gradual, de esta forma te aseguras que pueda ser permanente.
4. Escribe tus límites y compartelos.
De esta forma te aseguras tu compromiso. Al compartirlo con más personas te hace más consciente de lo que has estabelcido como un compromiso y te ayudará a mantenerte en el camino.
5. Prueba tus nuevos límites
Es necesario que pongas a prueba tus nuevos compromisos y tus nuevos hábitos. Intenta por una semana cómo te sientes con los nuevos límites.Haz una reflexión diaria de cómo te sientes, cómo te fue durante el día y cómo manejaste tus nuevos límites. Sobre todo, presta atención a cómo te sientes.
6. Ajusta
Si en el punto anterior te sentiste demasiado ansioso o hasta de malas por los nuevos límites y por el cambio tan brusco, entonces es necesario realizar algunos ajustes. Usualmente, el sentirte mal o de malas es un indicador de que fuiste demasiado lejos, intenta ajustar tus límites a algo que te haga sentir mejor y más en control.
Recuerdo el objetivo de este ejercicio es desarrollar tu conciencia y que te sienas mejor, no lo contrario. Así que ajusta en base a tu forma de sentir y a lo que quieres lograr. Tal vez puedas también realizar algunos ajustes en cuanto a ponerte recordatorios, o a lo mejor indetificar algunas otras áreas en las que puedes mejorar.
A continuación te comparto algunos límites que puedes empezar a poner en cuestión del teléfono y la computadora, y puedes aplicarlo a cualquier otro tipo de tecnología que en este momento te sientas con un poco de problemas.
Límites simples para el teléfono
Creo que los móviles son las adicciones más comunes que vemos en estos momentos. ¿A poco no?, siempre ves a alguien que esta viendo a su teléfono, aun caminando, aun cuando te encuentras en una reunión y te volteas a ver a una persona y está en el teléfono, cuando estás en el trabajo y hasta en el restaurante.
Para evitar caer en el exceso y en perder el tiempo y dejar de disfrutar tu vida, hay algunas cosas muy sencillas que podemos implementar para reducir el tiempo que pasamos viendo el celular.
Establecer lugares en donde NO utilizar el teléfono
Por ejemplo, puedes establecer la regla de no utilizar el teléfono en la mesa, cuando comes. Es más ni siquiera ponerlo a un lado (como muchos acostumbramos a hacerlo). Esto te ayudará en tus relaciones personales, pues realmente estarás manteniendo una conversación y compartiendo la comida. Asimismo, si buscas implementar la alimentación consciente este es un gran paso que te ayudará a disfrutar tus alimentos y a ser más consciente de cuando ya estás satisfecho.
También es muy bueno evitar usar el teléfono mientras manejas, es más ni está permitido, pero muchas personas lo siguen haciendo. Además de que no está permitido, podrías ocasionar un accidente, así que es una muy buena regla a seguir.
Borra las apps que te causan más problemas
Elimina las aplicaciones de tu teléfono que te causan más problemas. Por ejemplo si sabes que pasas mucho tiempo en Facebook o Twitter o alguna otra red social, puedes intentar borrar la app. O de plano puedes borrar todas las app de redes sociales y quedarte con las que te pueden ayudar a implementar mejores hábitos. Existen algunas apps para meditar, para ser más agradecido, de productividad o para leer libros. El hecho de no tener la tentación a la mano te ayudará enormemente para ser más consciente de la cantidad de tiempo que pasas en las redes y además a no hacerlo más.
Responde a los mensajes en horarios definidos, a menos que sean urgentes
A veces tendemos estar tan al pendiente de nuestro teléfono que cada vez que nos llega un mensaje o correo queremos contestar inmediatamente. El punto con esta estrategia es que siempre estamos siendo distraídos con las necesidades de alguien más, aun cuando no son importantes. Te hace menos productivo, te limita la atención y además evita que puedas permaneces presente en la actividad que te encuentras haciendo en ese momento.
Puedes por ejemplo, poner un horario de respuesta como en la mañana, o al medio día o en la noche. Y limitar el tiempo en el que haces esto. No tiene que ser todo al mismo tiempo, puede ser un momento para correos y otro para los mensajes.
Claro que habrá mensajes que sean urgentes y que tengas que responder inmediatamente, pero estos tienen que ser la excepción y no la regla.
Límites para la computadora
Lo cierto es que muchos de nosotros trabajamos en la computadora, y hasta parece a veces que es una extensión de nosotros, pero también yo reconozco que a veces la tecnología ocupa gran parte de nuestra vida.
Así que sin lugar a dudas un poco de límites en cuanto a las computadoras no nos caería nada mal.
Establece tu intención
Tú sabes que el establecer tu intención como parte de tu vida y sobre todo al inicio del día puede hacer una gran diferencia en lo que vives y en lo que logras. Y esto también es algo que puede aplicar para cuando trabajas en tu computadora, al sentarte en tu escritorio establece cuál es tu intención, cuáles son las primeras tareas que quieres realizas y las más prioritarias. Acostúmbrate a hacer primero lo más importante de tu trabajo y del día, así podrás lograr más objetivos y realmente serás más productivo.
Realiza una tarea a la vez
¿No te pasa que a veces tienes todo abierto a la vez, y tienes la inquietud de que tienes demasiado trabajo y demasiadas cosas abiertas en tu ambiente de trabajo? El enfocarte y comenzar a trabajar en una tarea a la vez te ayudará a lograr las cosas más rápidamente pues las harás totalmente enfocado en ello. Esto es un poco de lo que es mindfulness o atención plena, y te ayuda también a tener una limpieza mental, pues no tienes esa sensación de tanto que hacer y todo abierto, es como cuando tienes un desorden a tu alrededor. Te sientes un poco mal y no te sientes tan a gusto.
Desde ahora comienza a cerrar todas las ventanas que te impidan enfocarte en lo que haces, trabaja en una tarea a la vez y apaga todas las aplicaciones que te puedan distraer. Si tienes miedo de que se te olviden las cosas puedes establecer recordatorios, llevar un planificador o tomar notas. Esto también le ayudará a tu cerebro a concentrarse más en la tarea que está haciendo.
Toma descansos frecuentes
Mucha gente piensa que el tomar algunos descansos en lo que trabajas es ser flojo, pero lo cierto es que los descansos te permiten moverte, te permiten descansar por un momento y esto ayuda a que vuelvas a la tarea con más concentración. Asimismo, tú sabes que el permanecer demasiado tiempo sentado no es bueno para la salud, así que pon algunas alarmas y tómate un descanso, párate, camina, haz un poco de yoga de oficina o algunos estiramientos, ve por un vaso con agua.
Cuando regreses de tu descanso, vuelve a establecer tu intención y verás que vuelves con más energía y concentración.
Limita los mensajes, el navegar por la red y revisar tus sitios favoritos
Así como lo hiciste con el móvil, establece algunos limites y horarios para checar tus mensajes, correos, y tus redes sociales. Establece un horario para hacer estas cosas, y limita tu tiempo a 5 o 10 minutos. Puedes utilizar un timer o una alarma para recordarte.
¿Cómo ves? Estos son algunos consejos que te ayudarán a manejar de mejor forma la tecnología, pero sobre todo te ayudarán a ser más consciente de las cosas en las que pasas tu tiempo, en enfocarte en lo que es importante, y en practicar tu atención plena, Esto tiene muchos beneficios, desde el ser más productivo, hasta el ser más feliz pues tienes menos estrés y menos distracciones. Aprendes verdaderamente a vivir tu vida más consciente de lo que eres y lo que eres capaz de lograr.