Las creencias limitantes son creencias falsas que nos impiden perseguir nuestras metas y deseos, son aquellas ideas que sin darnos cuenta están ahí por default y con las cuales nos definimos y definimos lo que nos sucede día a día. Las creencias limitantes pueden impedirte hacer cosas importantes, como solicitar el trabajo de sus sueños o encontrar la relación que deseas (o dejar la que no deseas).
Qué son las creencias limitantes
¿Alguna vez has hecho una afirmación como “No soy bueno en matemáticas” o “Tengo dos pies izquierdos y no soy capaz de bailar” o “No puedo hacerlo”? Pues estas declaraciones en realidad son creencias limitantes, aun si piensas que hay razones por las cuales las crees, todo lo que hacen es limitarte y mantenerte en el mismo lugar afirmando lo mismo.
Nuestras creencias ponen límites y limitaciones a lo que percibimos como un comportamiento razonable. Algunas creencias son positivas y algunas creencias son negativas. Hay algunas creencias que nos impulsan a ser mejores y buscar lo que deseamos, pero sin darnos cuenta habrá algunas creencias guardadas en nuestro subconsciente que nos impide lograr lo que deseamos.
Una creencia limitante es un estado mental, convicción o creencia que crees que es verdad y que te limita de alguna manera. Esta creencia limitante podría ser sobre ti mismo, sobre cómo ves el mundo, cómo te presentas al mundo y las interacciones con otras personas o con el mundo y cómo funciona.
Las creencias limitantes pueden tener varios efectos negativos en ti. Podrían evitar que tomes buenas decisiones, aproveches nuevas oportunidades o alcances tu potencial. En última instancia, las creencias limitantes pueden mantenerte atrapado en un estado mental negativo y obstaculizarte de vivir la vida que realmente deseas.
Podrías definir las creencias limitantes en tres categorías:
- Creencias limitantes sobre ti mismo que te hacen sentir que no puedes hacer algo porque algo está inherentemente mal en ti.
- Creencias limitantes sobre el mundo que te hacen sentir que no puedes hacer algo porque nadie te lo permitirá.
- Creencias limitantes sobre la vida que te hacen sentir que no puedes hacer algo porque es demasiado difícil.
Nuestras creencias pueden poner límites saludables a una conducta cuestionable. Pero las creencias limitantes nos impiden lograr y obtener lo que deseamos en la vida.
¿Cómo se crean las creencias limitantes?
Durante la infancia
Gracias a los últimos estudios e investigaciones realizadas en neurociencia podemos saber que gran parte de la forma en la que nos vemos a nosotros mismos, vemos a las personas con las que interactuamos y la forma en la que vemos al mundo se crea durante la infancia. De hecho, se menciona que hasta el 90% de nuestro sistema de creencias proviene de esta etapa tan importante.
La teoría del apego, es decir la conexión emocional que desarrollaste con tus padres y el ambiente en el que creciste, son en gran parte la base de nuestra forma de relacionarnos en nuestra vida adulta. Y esta conexión puede ser, la conexión que tenemos con nosotros mismos, con las personas y con nuestras relaciones amorosas.
Cuando sucede algo traumático durante esta etapa, los sentimientos de ese momento pueden permanecer atrapados en tu psique y en tu sistema nervioso. Entonces se vuelve como una programación que se repite cada vez que sucede algo parecido o tu subconsciente lo interpreta como igual de peligroso.
Cualquiera que sea la decisión que tomaste para permanecer a salvo en ese momento, la repites una y otra vez a medida que creces. Así es como se forma una personalidad en base al trauma, además de las creencias negativas que adoptamos para sobrevivir esa situación.
Si no atiendes y sanas lo que sucedió en tu infancia, es posible que te encuentres en edad adulta y continues manteniendo las mismas creencias y comportamientos que sin querer adoptaste cuando eras niño.
Las creencias limitantes también pueden provenir de tu familia.
El sistema de creencias de tu familia juega un papel importante en cómo ves e interactúas con el mundo.
Sylvia Lafair, una terapeuta familiar, dice en su libro Don’t Bring It To Work: Breaking Family Patterns that Limit Success que:
No siempre adaptamos nuestras acciones a las demandas reales de una situación.
En cambio, recurrimos a viejas formas de responder que están cargadas de emociones y, a veces, terriblemente contraproducentes.
Adoptando el comportamiento que encontramos por primera vez en nuestras familias, hacemos lo mismo una y otra vez, incluso si nos mata. Seguimos aprisionados por nuestro pasado.
El sistema familiar en el que creciste, para bien o para mal, da forma poderosamente a lo que crees sobre la vida y cómo interactúas con el mundo.
Creencias limitantes acerca de ti mismo
Las creencias más impactantes que tenemos acerca de nosotros mismos, nuestro valor y lo que merecemos se crea precisamente en la infancia. Las creencias limitantes que tenemos alrededor de nuestra propia imagen son las que más nos mantienen estancados y en situaciones que no nos hacen felices.
Lo peor de todo esto que la mayoría de estas creencias están guardadas en nuestro subconsciente, por lo que es muy difícil darnos cuenta de ellas, no es hasta que hacemos un trabajo profundo que vamos una a una identificando todo aquello que nos limita.
No hay cosa que nos limite más que esa programación automática que corre en nuestro subsconsciente y que nos hace actuar y presentarnos al mundo de forma limitada. Date cuenta que estas creencias están llenas de emociones, necesidades insastifechas, inseguridades y traumas que se almacenaron en nuestro sistema nervioso y nuestra mente.
A continuación te muestro algunos ejemplos de creencias limitantes comunes sobre ti mismo y tu valor:
- Hay algo malo en mí
- No sirvo para nada
- Soy tonto o No soy inteligente
- Soy un fracaso.
- No puedo hacer que las cosas sucedan
- No merezco una vida mejor.
- Las cosas simplemente no funcionan para mí.
- Todo es culpa de mis padres o de alguien más
- Soy una víctima
- No puedo cambiar mi vida.
- Tengo mala suerte
- No puedo salir de esta situación
- No merezco ser feliz
- No merezco ser amado
- La gente siempre me lastima
- La gente siempre me ve mal o me trata mal
- No soy bonita / guapo
Creencias acerca de cómo vemos al mundo
No todo es acerca de nosotros mismos, lo cierto es que gran parte de nuestras creencias limitantes involucra también el cómo vemos al mundo y nuestra interacción en él.
El tener traumas de apego durante la infancia temprana nos hacer sentir que estamos en un mundo peligroso, poco seguro o violento, por lo cual podemos desarrollar esta creencia de que el mundo externo y las personas están ahí para lastimarnos, o si no nos protegemos de alguna forma terminaremos lastimados.
Este tipo de creencias impiden que podamos conectar de manera honesta y profunda con el mundo y con las personas a nuestro alrededor. Recuerda que todo esto sucede sin que tú seas realmente consciente de esta situación, por lo que es posible que te cueste trabajo conectar con las personas, o hayas desarrollado mecanismos de defensa como la disociación que te mantiene siempre alejado, viviendo en tu propio mundo y sintiendo que no perteneces en ningún lado.
Asimismo, algunas de estas creencias incluyen el cómo te presentas al mundo, pueden haber creencias que incluyen el mantener cierta imagen social o el comportarse de determinada forma para ser aceptado socialmente.
Y bueno, como lo decía la principio, gran parte de estas creencias limitantes también involucran aquellos que tus papás te hayan heredado, como por ejemplo los prejuicios, la discriminación, y el tener fobias a determinados grupos de personas y otras cuestiones que pueden ser socialmente aceptable en cierto lugar como el racismo o el clasismo.
Esto no siempre es hacía los demás, sino hacía ti mismo, y si perteneces a algún grupo que ha sido discriminado, es posible que consideres que no mereces o no perteneces por verte diferente, por ser mujer o por ser homosexual o no adherirte a los géneros establecidos.
Ejercicio para identificar tus creencias limitantes
El siguiente ejercicio de creencias limitantes es una herramienta poderosa que puedes utilizar para eliminar las creencias limitantes en cualquier área de tu vida.
Los cinco pasos son simples, pero te sentirás más ligero, más realizado y más feliz cuanto más lo hagas.
Paso 1: Elige un tema sobre el que desees eliminar las creencias limitantes.
Quizás quieras dejar de limitarte en tu trabajo. Quizás quieras dejar de limitar tus finanzas. Tal vez quieras dejar de limitar lo feliz que puedes ser en tu relación.
No importa lo que elijas, ya que esta técnica de limpieza de creencias limitantes se puede usar para cualquier cosa, pero elige algo que en este momento este sobresaliendo en tu vida.
Vamos a utilizar el tema del dinero como ejemplo, el cual es muy común y puede ayudarte en este momento.
Respira tres veces profundamente para concentrarte y dejar que todo fluya.
Paso 2: Escriba una lista de creencias limitantes que tenga sobre ese tema.
Escribe todo lo que te venga en mente acerca de este tema, en este caso vamos a escribir todo acerca del dinero. Todo, todo. Usualmente, lo primero que te viene en mente, no importa que tan loco suene, es algo que tu subconsciente tiene ahí guardado. Así que trata de no editar o cancelar tus pensamientos.
Con el ejemplo del dinero, es posible que no sea tan difícil sacar una lista de creencias. Por ejemplo, aquí te dejo algunos que se me ocurrieron.
- Nunca hay suficiente
- El dinero se me va como viene.
- Es muy duro tener dinero
- Nunca seré rico
- Mi familia era pobre, así que yo también lo soy
- No puedo ahorrar
- El dinero no crece en árboles
- El dinero es malo
- Los ricos son malos
- Los impuestos son tu peor enemigo
- El gobierno está detrás de tu dinero
- No puedes confiar en nadie con dinero
- Nunca te devuelven el dinero cuando prestas dinero
- El dinero es la raíz del mal
Paso 3. Haz tapping o EFT para deshacerte de cada una de las creencias.
Aquí mi receta de EFT rápido, pero también puedes ir a este artículo de describo el tapping regular.
Paso # 1: Elige una de las creencias limitantes que has identificado.
Observa cómo te sientes, no importa si no sabes el nombre de la emoción, simplemente nótalas.
- ¿Qué sientes?
- ¿En qué parte de tu cuerpo lo sientes?
- ¿Qué ves o escuchas?
- ¿Cómo sabe que es un problema?
Paso # 2: Evalúa
- En una escala del 1 al 10, qué tanto lo sientes?
Paso 3: Haz el tapping
Use dos dedos para tocar los siguientes puntos, mientras se concentra en la sensación de sus dedos en su piel:
- Justo en medio de tu cabeza
- entre tus cejas
- al lado de tu ojo
- debajo de tu ojo
- justo debajo de la clavícula
Mientras lo haces, di “Lo dejo ir”. También puedes agregar “Es seguro dejarlo ir”.
Nota: no importa en qué lado toques (derecho o izquierdo), puedes hacerlo en cualquier lado o en ambos si lo deseas.
Paso # 4: Paz
Agarra tu muñeca, respire profundamente, exhala y di “paz” – y vaya a un recuerdo de paz, armonía y tranquilidad por un momento.
Paso # 5: Vuelve a verificar
Regresa a tu problema en tu mente y observe cómo ha cambiado tu sentir.
- ¿Te sientes diferente?
- ¿Es diferente la intensidad del sentimiento?
- ¿La memoria se ve o suena diferente?
- Solo fíjate.
Paso # 6: Repite
Repite los pasos tres a cinco hasta que el sentimiento o la memoria se haya “invertido”; en otras palabras, la memoria negativa ha sido reemplazada por una memoria positiva.
Paso 4. Agradece a estas creencias por la forma en las que te han protegido
Puede parecer contrario a la intuición agradecer estas creencias; después de todo, te limitaron, ¿verdad? – pero es importante respetar estos pensamientos. Recuerda que todo esto se ha generado como un mecanismo de protección en un momento en donde tu mente y tu cuerpo necesitaban ser protegidos.
Es posible que hayan estado contigo por mucho tiempo, pero hoy es el momento de dejarlos ir sin resentimiento y con una actitud de compasión hacía ti mismo y ese individuo que las necesitaba para sentirse bien.
En este momento solo toma un momento para respirar profundamente y agradecer desde tu corazón a tus creencias limitantes y al exhalar simplemente déjalas ir finalmente de tu vida.
Al hacer este ejercicio de creencias limitantes, deberías sentir que las emociones asociadas con estas diferentes creencias cambian, e incluso puede sentirse más ligero.
Puedes repetir este proceso con cualquier área de tu vida en la que tengas creencias limitantes.
A medida que avanzas en este proceso, comenzarás a ver todas las diferentes posibilidades disponibles para ti y estarás listo para cualquier oportunidad que la vida te presente.
No tienes que reemplazar estas creencias limitantes por otras nuevas. Solo tienes que descubrir nuevas formas de ver la vida más abiertas y empoderadoras.