Frecuentemente, pensamos que las características de lo femenino y lo masculino únicamente se relacionan con el género de cada persona, pero esto en realidad solo es una pequeña parte de lo que estas dos polaridades se refieren. Lo cierto es que todos tenemos habilidades masculinas y femeninas y todos tenemos un sin fin de posibilidades de desarrollar una combinación de estas dos características.
Algunas personas como Tony Robbins, se refieren a este concepto como la Ley de la Polaridad o Ley de los opuestos, esta ley simplemente define cómo todo en este mundo o en esta dimensión, tiene dos polos, como por ejemplo, el bien y el mal, el amor y el odio, la luz y la oscuridad. Tendemos a pensar en ellos como algo bueno o malo, pero en realidad nos ayudaría más si lo vemos como los polos magnéticos de la Tierra, simplemente son los lados que forman la parte de un todo, con una variedad de posibilidades entre ellos dos.
Estos polos nos ayudan a experimentar un abanico de emociones y experiencias que nos ayudan a reconocer qué es lo que realmente deseamos en nuestra vida. Esther Hicks habla de esto como una oportunidad para reconocer tus mas profundos deseos, si estás triste puedes reconocer que esto no es lo que quieres vivir y te ayuda a establecer lo que deseas, como la felicidad. Te permite ser creativo para hacer de tu vida lo que deseas.
Solo pregúntate, ¿cómo podrías reconocer lo que es realmente la felicidad si no existiera la tristeza? ¿cómo experimentas el amor profundo sin saber lo que es el dolor o el odio? Cada uno de los polos es esencial y fundamental para la existencia del otro. No hay día sin la noche. No hay luz sin oscuridad. Aunque parezcan opuestos son la parte de un todo que nos permite experimentar la vida en esta dimensión física.
La energía femenina y masculina
Estos opuestos, en específico el femenino y el masculino tienen una repercusión en nuestras vidas. El cómo piensas, cómo te comportas y lo que sientes siguen las expectativas culturales con las que creciste y tu sistema de creencias. El tomar conciencia de algún tipo de desequilibrio entre estas dos energías y el comprender cómo podemos integrarlas en nuestra vida te puede ayudar a vivir en armonía y eliminar comportamientos o experiencias poco agradables.
Aunque parezca un poco loco, como te decía al inicio, todos tenemos una parte femenina y una parte masculina. De hecho, tendemos a pensar que si somos mujeres entonces tenemos un cerebro de mujer y si eres hombre entonces tienes un cerebro masculino. A mí me ha tocado muchas veces escuchar, como porque somos mujeres tenemos que pensar de cierta forma o podemos hacer ciertas cosas, pero yo creo personalmente que cada individuo tiene ciertas habilidades y se inclina hacia cierta energía.
En el 2016, se llevo a cabo una investigación en donde se pudo comprobar que esta creencia de que tienes un cerebro femenino o masculino no es posible. La premisa es lo que todos creemos como que todos debemos pertenecer a cierta categoría basada en nuestro género, pero en dicho estudio se comprobó que independientemente de nuestro género y las diferencias que podamos tener en base a esto, los cerebros no pueden clasificarse como femenino o masculino.
Todos tenemos ciertas características que pueden ser más comunes en los hombres y otras más comunes en las mujeres, pero la verdad es que podemos encontrar un sinnumero de posibilidades. Nuestra personalidad, actitud, intereses y comportamientos basados en nuestra infancia y nuestro sistema de creencias hacen que no haya un modelo a seguir.
Lo que si puede haber es que recurramos a ciertos comportamientos y habilidades de cierta energía y entonces exista este desequelibrio, ya sea en ser demasiado racionales o demasiado emotivos.
El impacto social
Hoy en día, socialmente, le damos más valor a la energía masculina es decir lo racional, la fuerza, la acción, y continuamos disminuyendo la importancia de lo femenino, lo emocional, la creatividad, la intuición, para crear un equilibrio. De hecho, hace poco leí un libro del shaman Durek, Spirit Hacking, en donde expone bastante bien la relación entre nuestra situación actual con este desequilibrio de energías. Viendo esto reflejado en los gobiernos y en general en la sociedad, en donde nos dejamos llevar hacia lo físico y lo racional y tendemos a ignorar o a burlarnos de esa parte tan importante que es la emoción y la intuición.
A nivel social podemos ver una repercusión en este desequilibrio. En donde las mujeres han tenido que defender sus derechos de equidad, pues en sociedades machistas todavía se cree que el ser mujer es un defecto o que no podemos tener cargos sociales importantes. Asimismo, podemos ver que cuando como país (hablo en general) se adopta una actitud más masculina no significa que sea malo, simplemente que abusamos de ciertas habilidades dejando de fuera otras, lo que genera este desequilibrio. Más adelante te hablaré de las características de cada uno, pero siendo una sociedad que tiende a lo masculino quiere decir que nos enfocamos en el individualismo, en ser más decisivos, aun cuando esto sea de forma violenta y se continue denigrando el lado espiritual o femenino.
Hace poco leí un artículo que decía como los países con mujeres gobernando habían tenido mejores resultados ante la situación de Covid-19 que otros países, y asimismo en Forbes (vínculo al final del artículo) detalla como después de la crisis financiera del 2008, hubieron varios informes que demostraban como los bancos y los países que tenían mayor representación de mujeres en el liderazgo, particularmente en el sector financiero, sufrieron menos por la crisis económica mundial. Como era de esperarse, esto provocó un llamado a una relación de género más equilibrada en el liderazgo, y al menos en Europa, los cambios de gobernanza posteriores a 2008 aumentaron la representación femenina en los grandes bancos del 15% al 33%.
Nuevamente, esto no es para decir que uno es mejor que el otro, simplemente para demostrar como ante un enfoque desproporcionado ante la energía masculina, nos puede generar muchos más problemas sociales de lo que nos imaginamos. Y esto mismo se lleva a cabo a nivel individual, en donde el exceso de cierta energía, independientemente si eres hombre o mujer, puede llevarte a vivir experiencias poco agradables o a estar en descontento con tu vida o afectando tus relaciones amorosas y personales.
El impacto en las relaciones personales
Aplicada a las relaciones, la ley de polaridad funciona atrayendo lo opuesto, es decir que una persona la cual tiene una energía femenina se sentirá atraído por una persona con una energía más masculina. Es así, como inconscientemente vamos buscando ese equilibrio.
Si dos personas tienen una polaridad sexual similar, es decir, ambas son más “masculinas” o más “femeninas”, entonces la atracción entre ellas disminuirá. Pero si hay una diferencia, donde uno es extremadamente “femenino” y el otro compañero es “masculino”, entonces la atracción física será mayor. Esto representa como “los opuestos se atraen” en acción.
Yo personalmente creo, que hemos sido educados para buscar a nuestra media naranja, es decir a alguien que nos complemente, pero en realidad tenemos la oportunidad de desarrollar esas habilidades y características en nosotros mismos, así como cultivar el amor propio. De esta forma no estamos siempre buscando a alguien que nos complemente, sino estamos buscando a alguien con quien compartir nuestra vida y nuestras experiencias. Enriqueciéndonos el uno al otro, no buscando llenar vacíos.
Pero si estás en una relación en donde evidentemente uno tiene una energía mucho más femenina o viceversa, lo puedes utilizar para darte cuenta cuales son esas cosas que te haría bien tratar de desarrollar.
Sentimos atracción por muchas personas, pero solo podemos sentir amor verdadero por alguien que nos equilibra y es compatible a largo plazo. Muy pocas personas están cien por ciento completamente equilibradas, pero tienden hacia una energía más masculina o más femenina. El punto con esto, es que no debemos de pensar que es necesario que la otra persona nos complemente, más bien fomentar el desarrollo de esa energía dentro de nosotros mismos.
Es importante que recordemos que nuestra pareja es un espejo, por lo que la otra persona te muestra en lo que debes de trabajar en ti mismo. Cada persona con la que estamos en una relación es en algún momento un maestro, en algunos momentos un estudiante, siempre estamos en constante desarrollo y si vemos a nuestra pareja como un compañero para desarrollarnos nuestras relaciones podrán ser aun mas profundas.
Energía Masculina
Energía Femenina
Características físicas y de energía
Fuerte presencia física, centrado en sí mismo, firmeza y una sensación de firme propósito y fuerza.
Apertura, libertad, fluidez, lleno de energía vital, a veces más enriquecedor, a veces más salvaje y libre.
Dirección primaria
La esencia masculina es impulsada principalmente por la dirección en la vida, o por una misión vital.
La esencia femenina se mueve principalmente por las emociones en una relación íntima. La fuerza femenina se trata de abrirse al amor y dar amor.
Enfoque
Enfocado en un modo solo a la vez y en una única tarea en cuestión.
Buscando problemas: ve un problema y quiere solucionarlo (incluso cuando no lo hay)
Fluido: la interrupción no existe porque se está en un estado constante de flujo.
Buscando el amor: la mejor manera de aumentar la luminosidad y la belleza es conectando con el amor.
Metas
La energía masculina busca la liberación: de las cargas de la vida y la relación, de las limitaciones de la vida.
El masculino se esfuerza por sentirse libre y experimentar el éxtasis y la libertad. Quieren estar libres y dejarse llevar.
La energía femenina se basa en la atracción y el encanto, atrayendo a otros a través de la apertura del corazón a la belleza y el amor.
Lo femenino quiere llenarse de amor, energía y atención. La fuerza femenina se trata de abrirse al amor y dar amor.
Deseos
Responde al desafío, cobra vida en el límite y cuando se le desafía.
Ama la competencia para ponerse a prueba y romper las barreras.
Quiere poseer
Adicto a permanecer vacío y liberarse en él.
Quiere sentirse apreciado.
Desea ser notado y sentirse atractivo.
Vive en un mundo de sensaciones, el cuerpo, la conexión con el flujo de elementos y las fuerzas naturales.
Adicta a las formas de llenar su sensación de vacío.
Quiere sentirse comprendido.
Retos
Le resulta fácil dejar ir y salir.
A menudo se va demasiado pronto.
Enfoque más a la acción que a la emoción
Se aferra a todo.
A menudo se queda demasiado tiempo.
Escucha principalmente la emoción y el tono.
El desequilibrio de energías
Dentro de ti mismo puedes tener una atención hacia una energía en específico y esto puede desatar ciertos comporatmientos.
Inclinación hacia la energía femenina y carencia de la energía masculina
Cuendo carecemos de energía masculina se tiene problemas con sentirse seguro de si mismo, es posible que se tengan emociones de frustración o enojo constante. Esto hace que se tenga como un efecto de olla de presión, en donde se mantiene este sentimiento latente de frustración, hasta que sucede algo que lo desata. El problema con este hecho es que una vez que sucede algo que desata estas emociones, la persona puede sentir un gran remordimiento y esto hace que se vuelva a cerrar, regresandola al mismo círculo vicioso.
En estos casos, la mujer o la persona con falta de energía masculina, da todo hacia los demás sin proveer por sí misma. Se tienden a tener más emociones de sentirse víctima, de sentirse impotente, o querer manipular a los demás para sentirse más seguro. Además, la falta de esta energía masculina hace que se caiga en la co-dependencia, en el miedo a ser abandonado y por lo mismo actuar como si necesitarás de la otra persona.
Inclinación hacia la energía masculina y carencia de la energía femenina
Es una persona que le cuesta trabajo expresar sus sentimientos sin sarcasmo o sin acumular esas emociones y tratar de ocultarlas. El tratar de esconder las emociones puede hacer que la persona sufra de crisis emocionales, o en algún momento de su vida sufra de ansiedad o de depresión.
Las emociones no se pueden reprimir o también darán lugar a un efecto de olla a presión, pero este efecto con las emociones (no las necesidades como con la mujer) es mucho más dañino y peligroso.
Como lo dije al principio, tenemos una cultura patriarcal y un machismo totalmente en nuestra sociedad, lo que hace que a los niños se les enseñe a no llorar y a esconder sus emociones. No solo a los niños, sino a las niñas también, por lo que si no creciste en un ambiente seguro en donde pudieras demostrar tus emociones, entonces a lo mejor pudiste haber desarrollado más esta energía masculina que de alguna forma te pudo hacer sentir más seguro. Aunque el impacto es que poco a poco vas limitando tus emociones y por lo tanto la satisfacción en tu vida.
Los efectos de dirigir la energía hacia lo masculino es que se puede caer en comportamientos como: abuso de poder, querer dominar a su pareja o a otras personas, ser demasiado agresivo o confrontacional. Puede ser inestable o enfocarse demasiado en sí mismo.
Encuentra el balance entre tu energía femenina y masculina
Como lo viste cada una de las energía tiene sus propias características y esto no significa que uno es mejor que el otro, simplemente son polos opuestos que te permiten experimentar las situaciones de distintas formas. Al encontrar un balance entre estas dos energías como individuo te permitirá encontrar un nivel de consciencia y de satisfacción en tu vida que antes no habías podido experimentar.
Desde mi punto de vista personal, y siendo una persona sumamente enfocada a objetivos y siendo muy racional, debido a mis experiencias de infancia y rasgos de personalidad me llevaron a desarrollar una energía mucho más enfocada a lo masculino. Puedo decir que cuando te enfocas demasiado en un lado, te pierdes de experimentar muchas otras cosas. En mi desarrollo personal, tuve que prestar un enfoque a desarrollar este lado emocional, y al abrirme a la vulnerabilidad me abrió las puertas a otro nivel de experiencias, a obtener muchos más éxitos y un sentimiento de satisfacción más profundo que cualquier cosa que haya intentando antes.
Tu energía puede ir cambiando poco a poco mientras que tu desarrollas una conciencia más profunda de ti mismo, desarrollas el amor propio y un sentido de mindfulness. Comienza a abrazar ese lado que te falta más, si sientes que tu energía está más enfocada a lo masculino, trata de abrirte un poco más a la vulnerabilidad y a ponerte en contacto con tu sentido de ti mismo. Abraza la fuerza femenina, acepta las emociones como medio para saber cómo te sientes y de ahí poco a poco dirígete hacia una emoción más positiva. Céntrate en el amor, en el amor hacia ti mismo para que puedas reflejarlo al mundo y a tus relaciones personales, abraza la sabiduría de lo femenino.
Si eres una persona con más energía femenina, aprende a confiar más en tu capacidad para actuar con claridad a pesar de tus emociones, desarrolla una inteligencia emocional, que te permita actuar de formas más segura. Enfoca tu energía en tus objetivos y metas personales, limpia tus creencias limitantes y alcanza tus sueños.