Sabemos que una buena relación de pareja tiene dentro de sus características más esenciales una buena comunicación. Y si, sin lugar a duda, todos y cada uno de nosotros, conversamos a diario con nuestra pareja. Pero ¿Significa eso que te estás comunicando? O aún más importante ¿Significa eso que te estás comunicando de una forma positiva? Pues no necesariamente.
En mi experiencia durante las charlas que he tenido con mujeres en Latinoamérica, he visto que la mayoría de las conversaciones de pareja pueden ser catalogadas dentro de dos tipos.
a. Conversaciones sobre las cosas pendientes: Estas conversaciones se enfocan principalmente en aquello que es necesario hacer o comprar para la casa y/o para la familia.
b. Conversaciones sobre otras personas: En estas conversaciones se incluyen todo tipo de chismes y/o críticas a otras personas ya sean familiares, amigos, colegas de trabajo o noticias.
Pero la comunicación de pareja va mucho más allá, la comunicación de pareja incluye:
- la oportunidad de expresar emociones y sentimientos frente a situaciones específicas.
- posibilidad de compartir deseos y planes futuros con la intención de establecer juntos un plan de acción para lograrlo.
- descubrir la evolución que vive el otro dentro de la relación.
Entonces
¿Cómo tener una buena comunicación de pareja?
Te propongo 5 hábitos para lograrlo.
1. Escuchar con la intensión de solo escuchar
Parece obvio pero lastimosamente no todos escuchamos de verdad. Y con esto me refiero a escuchar sin estar pensando en otras cosas y sin interrumpir. Escuchar sin ver el celular, sin distraerse con el entorno, sin defenderse y sin asumir. Y sobre todo y lo más importante, escuchar sin pensar en la respuesta que darás. Lo esencial en la comunicación de pareja es escuchar y ser escuchado. Permitir al otro expresar sus pensamientos, emociones y sentimientos de forma tranquila e ininterrumpida. Y no importa cuán bien creas conocer a tu pareja. Aquello de “Yo ya sé lo que va a decir” es irrespetuoso y puede limitar que ambos evolucionen juntos dentro de la relación.
Recuerda que sin importar los años que lleven juntos, cada uno de ustedes evoluciona y descubre nuevos intereses y preferencias con el tiempo. ¡Y tú no quieres perdértelas tan solo por creer que ya conoces todo sobre tu pareja! Estén siempre abiertos a conocer y entender más del otro. Dense la oportunidad de hablar, de desahogarse.
Así sea repetitivo, así sea emocional, dense la oportunidad de expresar. Finalmente, cuando escuches, hazlo también teniendo en cuenta la comunicación no verbal de ambos. No cruces los brazos, desvíes la mirada o hagas gestos negativos. Escucha también con tu cuerpo manteniendo una postura amigable y positiva y escucha lo que los gestos de tu pareja tienen que decir.
2. Preguntar para descubrir y para ratificar
¡Asumir está prohibido! Una buena comunicación de pareja se centra en lo que él otro expresa, ya sea física o verbalmente. Y si sientes que te quedan dudas, debes preguntar para asegurarte. Además, hacer preguntas (sin interrumpir) no es solo positivo para ti, para asegurarte de haber entendido lo correcto, sino también que ayudarás a tu pareja a expresarse completamente. Otro beneficio de hacer preguntas es que es una forma de demostrar interés. Tu pareja recibirá el mensaje de que te importa lo que está diciendo. Así, mientras más amigable y positivo sea el entorno, mejor se sentirán ambos y más dispuestos estarán a repetirlo. Te recomiendo que preguntes por ejemplo:
¿Hay algo más que me quieras decir al respecto?
Quiero asegurarme que te entendí bien, lo que tu sientes es …… porque ….. (ratificación)
Ten en cuenta que toda expresión de emociones, pensamientos y/o sentimientos tiene un objetivo y para asegurar el éxito en la comunicación de pareja, tú debes conocer cuál es. Es posible que tu pareja se exprese con la única necesidad de desahogarse o para ordenar sus pensamientos. Pero también es posible que lo haga porque espera una respuesta de tu parte. En esta última situación, es esencial que sepas si tu pareja espera o no una acción futura de tu parte y que contestes de qué forma y en qué tiempo podrás hacerlo. Para eso la mejor pregunta que debes hacer es:
- ¿Qué es lo que te gustaría que yo hiciera?
Finalmente asegúrate de cumplir con los compromisos que hagan tras esa conversación. De lo contrario aquellas palabras parecerán lanzadas al viento y la próxima vez ninguno de los dos estará dispuesto a comunicarse tranquilamente.
3. Habla concretamente
Considerando que la falta de tiempo es uno de los problemas más comunes en la sociedad actual, es importante que adquieras el hábito de hablar concretamente sobre el tema que te interesa. Esto no significa que debas abordar el tema directamente, sin ninguna anticipación o sin expresar tu necesidad de hablar al respecto. Significa que debes concentrar la conversación en un tema específico y en lo que deseas obtener de la conversación.
Practica y adquiera la habilidad de comunicarte con tu pareja. Ya sea que tengas un tema delicado del qué hablar, un sentimiento que expresar, o el interés de compartir algún dato interesante, aprende a comunicarlo. Empieza por informar brevemente el contexto. Este puede ser una situación puntual que te hizo sentir de tal o cual forma o un artículo interesante que leíste. Luego comunica concretamente lo que deseas. Puede ser:
- Me siento …. debido a …. y quiero ….
- Leí sobre…. me interesó porque…. y ante eso yo pienso que….
- Quiero saber lo piensas respecto a….
Y no olvides lo que dije en el paso anterior, debes comunicar lo que esperas de tu pareja. ¡Si esperas un cambio en tu pareja debes decírselo! No esperes que él o ella adivine lo que deseas, díselo concretamente y lleguen a un acuerdo. Finalmente no olvides agradecer, es importante que al final de cada conversación, ambos sientan que lo expresado tiene resultados positivos. Además, tal y como Angie nos lo explica, la gratitud beneficia la totalidad de tu vida.
4. Empezar por ofrecer antes que por pedir
Si el objetivo de la conversación es generar algún tipo de cambio en la dinámica de la relación, entonces debes empezar por aquello que tú estás dispuesto a hacer. Ten en cuenta que todo en la relación de pareja es de dos y que siempre hay algo con lo que tú puedas aportar. Así que de ahora en adelante, cuando busques un cambio, no lo hagas con reclamos ni impulsivamente. Expresa el problema, propón lo que tú estás dispuesto a hacer y finalmente pide (amable y concretamente) lo que esperas del otro. Este hábito es clave para discutir con tu pareja y obtener algo positivo, con él lograrás menos discusiones y más acuerdos. Además es una forma positiva de expresarse ya que no se centra en el otro sino que empieza por ti mismo.
Considera que una buena comunicación de pareja no señala culpables, sino que busca soluciones. No se enfoca en el problema ni desarrolla acusaciones. Una comunicación exitosa de pareja trabaja como un equipo interesado en aportar por igual para obtener el mejor resultado. Eso sí, no olvides que cada persona es diferente y por lo tanto, cada uno aportará de una forma específica. No esperes que tu pareja piense, sienta o responda como tú. Hazle saber lo que necesitas pero acepta positivamente lo que tu pareja hace para y por la relación.
De igual forma asegúrate de que aquello que tú estás dispuesto a hacer sea importante y útil para tu pareja. Y si no, entonces abre la posibilidad de nuevas opciones según los intereses y preferencias de ambos. Al final, lo importante es que exista un compromiso por parte de ambos para beneficio de la relación.
5. No posponer ni guardar resentimientos
Si existe algo que te moleste o con lo que no estés de acuerdo, háblalo. Ni el silencio ni el tiempo hará que cambien y mientras más lo pospongas menos objetiva será la conversación que tengas al respecto. En varias de las charlas que he tenido con mujeres, he podido evidenciar que muchos de los resentimientos existen por temas que no se han tratado.
Lastimosamente una de las partes asume que el otro debería saber que algo puntual le molesta y debería dejar de hacerlo. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la pareja ni sabía que estaba cometiendo un error, ni mucho menos sabía que lo venía repitiendo desde hace años. Así que mientras más rápido hables al respecto, mejor será porque en una buena comunicación de pareja las negociaciones son más frecuentes y más objetivas. No pospongas ni esperes que el tiempo lo arregle.
Con el tiempo los comportamientos solo se intensifican y si deseas que exista un cambio; debes hablarlo, llegar a un acuerdo y seguir adelante. Otro de los problemas es la mala costumbre de traer al presente o arrastrar reclamos de errores del pasado. No solo tu pareja se ha equivocado, sino tú también. Pero el amor verdadero trasciende los malos momentos y se mantiene unido en la construcción de una vida saludable para ambos. Así que si tienes resentimientos pasados descubre el inmenso poder del perdón y empieza a practicarlo. En lugar de insistir en reclamos, habla del presente, de la situación, momento o circunstancia en la que no te sientas feliz y encuentren en pareja una solución.
En resumen…
Una buena comunicación de pareja permite que ambos expresen sus sentimientos, emociones y pensamientos libremente teniendo una respuesta positiva de su pareja. Para lograrlo hay 5 hábitos que puedes empezar a emplear hoy mismo hasta que se conviertan en rutina y pase a ser la forma natural en la que te comunicas con tu pareja:
1. Escuchar al otro respetuosamente sin asumir, interrumpir o pensar en la futura respuesta. Escuchar únicamente con la intensión de descubrir lo que la pareja desea expresar.
2. Hacer preguntas para asegurar que la otra persona ha dicho todo lo que desea, para rectificar que has entendido lo correcto y para identificar qué es lo que tu pareja espera como respuesta de tu parte.
3. Exprésate de una forma positiva y concéntrate únicamente en un tema de interés y en el objetivo que esperas de la conversación. No todo tiene que hablarse al mismo tiempo, así que empieza tratando un tema a la vez.
4. Toda buena comunicación de pareja es de dos. Así que si vas a pedir un cambio, empieza por ofrecer aquello que tú estás dispuesto a hacer para lograr el cambio. Señalar culpables y reclamar no es positivo para la relación, mientras que crear compromisos mutuos desde el primer momento si lo es.
5. No esperes que el tiempo cambie las cosas por si solas. Tu pareja es tu mejor amigo/a y compañero/a de equipo, juntos tienen una vida por compartir y ésta no puede estar cargada de culpas y resentimientos. Aprende a perdonar el pasado y concéntrate en el presente de tu relación.
Pon en práctica estos pequeños cambios y déjanos un comentario contando tu experiencia o dificultad. Hasta pronto Marie
Marie
Creadora de Historias para Mujeres
Mariela Sánchez, escritora y coach especializada en mujeres. Creadora de Historias para Mujeres, página por medio de la cual ayudo a mujeres a recuperar su fuerza interior para afrontar y encontrar soluciones a situaciones específicas.
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