El establecer límites saludables es una parte importante de desarrollar nuestra identidad, de nuestro proceso de sanación y también de mantener una buena salud mental y bienestar general.
Lo cierto es que cada vez más escuchamos hablar del establecer límites, pero muy pocos sabemos cómo hacerlo. Las personas que hoy en día tienen claro cuales son sus límites y saben como comunicarlos de forma asertiva y saludable por lo general crecieron en un ambiente en donde los límites eran parte normal de las relaciones con sus familiares cercanos, o en su defecto han hecho un gran trabajo de sanación profundo.
Para algunos otros, el establecimiento de límites es un proceso, en donde vamos identificando nuestra necesidades, vamos conectando con nuestra autenticidad y vamos desarrollando la habilidad de poder comunicarlos adecuadamente. En este proceso la autocompasión y el amor hacia ti mismo son esenciales.
Contenido
¿Qué son los límites saludables?
Los beneficios de los límites saludables
Tipos de límites
La importancia de los límites en las relaciones
La falta de límites y la codependencia
Razones por las cuales es difícil establecer límites
10 formas de establecer y mantener límites saludables
¿Qué son los límites saludables?
De acuerdo a IPFW/Parkview Student Assistance Program, un límite es el espacio entre tú y otra persona; es un espacio claro en donde tú comienzas y la otra persona termina. El propósito de tener este espacio es el de protegerte y tener un buen cuidado de ti mismo.
Los límites saludables son esas fronteras que establecemos que nos permiten cuidar tanto nuestra salud mental, como emocional y física. Es importante decir, que los límites están sumamente vinculados con nuestra identidad, es algo ayuda a establecer nuestra individualidad.
Los límites pueden tomar varias formas y pueden ser rígidos y estrictos o tan poco establecidos que parecieran inexistentes. Este rango puede verse de la siguiente forma:
Si tienes límites más rígidos
- Mantienes a las demás personas a la distancia sin conectar realmente con ellos.
- Pareces desprendido o desinteresado, aun con las personas que amas
- Tienes muy pocas relaciones cercanas
- Evitas tener relaciones cercanas o acercarte demasiado a otras personas
Si tienes límites más abiertos o poco establecidos
- Te involucras en los problemas de los demás
- Tienes dificultad para decir no, aun cuando quieras hacerlo o sea en detrimento para tu salud
- Compartir demasiada información con otros
- Tratar de complacer a los demás por miedo al rechazo o al abandono
Los beneficios de establecer límites saludables
Los límites saludables es el equilibrio adecuado entre lo que permites y tu propio comportamiento
Las personas con límites saludables entiende que es importante conocerse a sí mismo y reconocer sus propias necesidades físicas, emocionales y mentales, con lo cual es más posible que pueda comunicarlas adecuadamente. De esta forma, es posible que la persona puede transmitir sus expectativas eficazmente y pueda conectar con otras personas de forma más honesta y cercana.
El establecer límites saludables te permitirá:
- Mejorar tu autoestima y respeto a ti mismo
- Mejorar tus relaciones personales
- Compartir información de manera apropiada (no demasiado, pero tampoco muy poco)
- Entender tus propias necesidades y deseos y saber cómo comunicarlos
- Valorar tus propias opiniones
- Aceptar cuando las otras personas te dicen no, y tener más confianza al decir no
- Tener relaciones compartiendo el mismo equilibrio de responsabilidad y poder
- Ser asertivo. Poder decir con confianza si o no y estar bien cuando otros lo hacen.
- Separar tus necesidades, pensamientos y deseos de otros. Reconoces que eres diferente a otras personas y eso está bien.
- Tener la confianza de tomar decisiones adecuadas para ti y tomar la responsabilidad de ellas y de tu propia felicidad.
Lo cierto es que la mayoría de nosotros tenemos distintas formas de establecer límites dependiendo de la persona o el ambiente. Por ejemplo, con la familia, con los amigos, en el trabajo o con la pareja, todos estos ambientes pueden verse con diferentes límites.
Tipos de límites
Hay diferentes tipos de límites que podemos ir estableciendo en distintas situaciones y con distintas personas. Algunos de ellos son:
- Físicos
- Sexuales
- Espirituales
- Relacionales
- Emocionales
- Mentales
- Legales
La importancia de los límites en las relaciones
Los límites en las relaciones pueden ser especialmente importantes.
“En pocas palabras, es saber cómo separar tus sentimientos o ‘cosas’ de los de otra persona. Como seres humanos, tenemos nuestros propios pensamientos, recuerdos y experiencias vividas y, a veces, eso puede volverse muy borroso con los de otra persona. Los límites son saludables para ayudarte a identificar y mantener ese espacio “.
Dra. Tara Quinn-Cirillo, psicóloga
Yo personalmente creo, que los límites son establecidos desde nuestra familia, y que gran parte de esto también es cultural, sobretodo en países en donde toda la familia tiene el derecho de opinar acerca de los demás.
El problema es cuando tenemos una pareja, es ahí en donde somos capaces de percibir algunos síntomas de la falta de límites y esto se traduce en relaciones tóxicas o relaciones en donde no nos sentimos seguros o bien. Aunque parezca demasiado, los límites determinan si una relación es saludable y feliz o es tóxica y disfuncional.
La falta de límites y la codependencia
Las personas que les cuesta trabajo establecer y mantener límites tienen una necesidad no satisfecha de sentirse amados, aceptados o de sentirse que importan. Esta necesidad pudo haber surgido por la forma en la que crecimos, determinado principalmente por nuestro modelo de apego o algún tipo de trauma emocional, e inconscientemente continuamos buscando esa necesidad básica de todo ser humano.
El problema con continuar con esta herida emocional almacenada en nuestro subconsciente es que continuamos buscando ese amor y esa aceptación en otras personas, y para hacerlo sacrificamos nuestra identidad y al mismo tiempo eliminamos los límites.
Y esto puede conllevar a otros muchos comportamientos que te pueden mantener en ese círculo vicioso de amor y falta de límites, en algunos casos la persona puede adoptar el rol de víctima y continuamente se presentan como tal, con el propósito de que algún día alguien pueda salvarlos.
Todo esto se traduce en patrones que perpetuamos ya sea con la misma persona o con el mismo tipo de personas, en donde el codependiente gravita hacia una persona narcisista o alguien que busca sentirse importante al tratar
Razones por las cuales es difícil establecer límites
- Miedo a la confrontación: el simple hecho de enfrentarse a otra persona o a la pareja puede ser abrumador para personas que nunca lo han hecho o para alguien que es codependiente. Esto es principalmente la causa cuando se han tenido otras experiencias de abandono, abuso o violencia física o emocional.
- Falta de conexión con uno mismo y sus necesidades: cuando crecemos en ambientes tóxicos lo más común es que haya habido algún tipo de desconexión con nuestras emociones o nuestro cuerpo, lo cual genera que no se sepa qué es lo que necesitas o deseas en determinado momento.
- La creencia de que los demás son más importantes: la creencia profundamente arraigada de que otras personas son más importantes y tú debes atenderlos, o el crecer en ambientes en donde se es responsable por las emociones de otros o el bienestar de otros, crear un factor abrumador que no te permite establecer límites para ti mismo.
- Miedo a perder la aprobación: particularmente si te encuentras en una relación con una persona narcisista este punto puede ser muy importante, pues establecer límites conducirá a una falta de aprobación. Para el codependiente, este es el miedo más grande, y trabajar con un terapeuta o un coach de vida durante este tiempo es fundamental para desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas y no simplemente ceder y volver a la antigua relación de falta de límites.
- Sentirse culpable: Es posible que al no tener experiencias pasadas en donde hayas tenido que establecer límites, y sobretodo si tienes esa creencias de que tu valor no es el mismo que de los demás, es muy posible que al establecerlos te sientas culpable. Esto puede resultar en no poder establecerlos mantenerse quejando, criticando o culpando a los demás, en lugar de tomar el control de su vida.
- Falta de apoyo – también es común que una persona en una relación codependiente esté emocional y socialmente aislada. Después de todo, su tiempo se dedica a tratar de hacer feliz a la pareja, y los amigos y la familia a menudo son ignorados o ignorados. Este aislamiento y la falta de apoyo benefician al narcisista, adicto o compañero emocionalmente abusivo, ya que es consciente de que es su única conexión.
- Baja autoestima y autoestima: Aunque sea un poco difícil de creer los límites están sumamente vinculados con nuestra autoestima y el amor propio. Lo cierto es que para mejorar nuestra autoestima es necesario trabajar en muchas cosas con las cuales está vinculadas pero en realidad no podemos trabajar únicamente o directamente con la autoestima. Cuando trabajas en tu autoestima y amor propio lo más seguro es que también comiences a establecer más límites o te des cuenta que hay algunos límites que mejorar. Personalmente creo que el ir trabajando en el establecimiento de límites también te ayuda a mejorar tu autoestima,
10 formas de establecer y mantener límites saludables
1. Autoreflexión
Disfruta un poco de autorreflexión mientras comienzas a leer estos puntos y cuando estés dispuesto a establecer o cambiar tus límites.
Para introducir y establecer límites con éxito, es clave comprender por qué cada uno de ellos es importante para ti y cómo beneficiarán tu bienestar emocional.
Tómate un tiempo para analizar cómo son tus relaciones personales, de qué forma te sientes cuando estás en distintas situaciones y con diferentes personas.
Al inicio puede haber esa reacción de que alguien más tiene la culpa o pensar que tú no puedes cambiar el cómo se comportan los demás contigo, pero te aseguro que cuando analizas la situación comenzando por cómo te sientes tú y exploras tu interior en reconocer la causa de esta forma de reaccionar o de sentirte, descubres que hay una razón y poco a poco puedes ir viendo de qué forma tú puedes evitar esos comportamientos, no cambiando a las otras personas sino la forma en la que tú te relacionas con ellas.
2. Ámate a ti mismo
Como te decía anteriormente, uno de los pasos esenciales para establecer límites está muy vinculado con la autoestima y el amor propio. Cuando comienzas este viaje lo más seguro es que poco a poco puedas establecer límites más saludables que realmente te ayuden a mejorar tus relaciones y la forma en la que te sientes a ti mismo.
El trabajo interior de amor propio es un proceso de aprendizaje, e implica desaprender todos esos mensajes negativos y estar abierto a mirarte a ti mismo desde un punto de vista completamente nuevo. De forma más abierta y más compasiva, pero también sabiendo que todas tus experiencias pueden mejorar cuando comienzas este trabajo desde tu interior.
3. Empieza pequeño
Si creciste en un ambiente en donde no era aceptable establecer límites o nunca te enseñaron cómo, lo más seguro es que hoy en día no sepas ni por donde empezar o te sientas con dudas o tengas miedo.
Es por eso que es importante comenzar con pasos pequeños, no esperando ser perfecto, y con mucha compasión para ti mismo.
Hacerlo lentamente y con una actitud de probar qué sucede y cómo te sientes, te permite tomar las cosas a un ritmo más cómodo y te brinda tiempo para reflexionar sobre si vas en la dirección correcta o si necesitas hacer algunos ajustes.
4. Conecta contigo mismo, tus emociones y tus necesidades
En este proceso de sanar y de profundizar en el amor propio, se lleva a cabo esta reconexión contigo mismo, con esta parte de ti que ha sido herida o lastimada y que de alguna forma nos lleva a desconectarnos de nuestras emociones, de nuestras necesidades físicas y emocionales y muchas veces nos hace tener una imagen de nosotros mismos que no es cierta.
El notar cómo te sientes, aun si no puedes mencionar la emoción, puedes notar cómo se siente en tu cuerpo o en tu mente, qué tipo de ideas o pensamientos estás manteniendo y esto te llevará a poco a poco realizar esta conexión.
De esta forma progresivamente comenzarás a notar lo que realmente necesitas para sentirte bien, de qué forma te puedes cuidar más, cómo puedes atenderte y así comenzarás a conocer lo que es necesario para mantener tu tranquilidad.
Los límites son cosas individuales y por lo tanto es necesario que conozcas qué es lo que necesitas, deseas y prefieres. Así podrás ir estableciendo lo que es aceptable para ti, lo que es saludable, positivo y beneficioso, o no es un límite efectivo dentro de la relación.
5. Sé consistente
Tal vez este represente un reto al inicio de nuestro viaje de establecimiento de límites, pero es necesario comenzar a desarrollar esta consistencia de establecer los mismos límites en el mismo ambiente que lo deseamos.
También es posible que en algunos casos nos sea más fácil establecerlo y en otros ambientes nos cuesta trabajo, y esto es totalmente normal. Solo tienes que ser consciente de que esto está sucediendo y permitirte ensayar y probar diferentes formas de lograrlo.
Una vez que logres más certeza en el establecimiento de límites Intenta mantener las cosas constantes y estables. Esto ayuda a reforzar tus umbrales y creencias originales, y asegura que esas líneas permanezcan claramente establecidas.
6. Habla acerca de los límites
A veces no sabemos cómo establecer límites o no conocemos cómo se ven esos límites, sobretodo si no crecimos en un ambiente en donde vieramos con el ejemplo este proceso. Por lo que muchas veces es muy beneficioso el estudiar cómo otras personas los establecen, cómo los comunican, cómo se ven.
En ocasiones es más beneficioso el acudir a un consejero, coach o una persona que sea una guía para nosotros que nos permita comprender más de cerca lo que queremos lograrlo. Así podemos ir viendo los diferentes tipos de límites establecidos en distintos ambientes, en pareja, en familia, con los hijos, con el jefe, con los compañeros de trabajo o con los amigos.
7. Practica el comunicarte asertivamente
Para muchos de nosotros la comunicación de límites y de nuestras necesidades emocionales no es fácil, sobretodo si venismos de una desconexión de nuestras emociones. Al inicio se puede caer en comunicarlos de manera agresiva o más fuerte de lo que quisieramos, por lo que es importante darte cuenta de que esto está sucediendo, pero también sé compasivo contigo mismo.
En mi caso, me daba cuenta que la forma en la que los comunicaba con mi pareja sonaba más agresivo de lo que realmente deseaba, así que me encontraba pidiendo disculpas por la forma en la que los comunicaba, pero al mismo tiempo tenía que mantener ese límite. Al inicio me hacía sentir mal la forma en la que me estaba comunicando, pero con el tiempo fue siendo más fácil y ya no había necesidad de ser agresiva o fuerte, el solo hecho de comunicarte a tiempo, sin que las emociones te hayan sobrepasado es suficiente para sentirte más empoderado y mas centrado para comunicarte asertivamente.
Mi consejo es trata de ser compasivo contigo, sé consciente de cuando no estás comunicandote adecuadamente, pero mantén esos límites que acabas de comunicar. El secreto aquí es la práctica, no podemos borrar años de no podernos comunicar en un par de veces de tratar de hacerlo. Así que es importante continuar practicando y adquieriendo más confianza para hacerlo asertivamente.
8. Siéntete libre de agregar extras
En algunos aspectos de nuestras vidas, ya existen límites, como en el lugar de trabajo. Pero lo más probable es que ni nos demos cuenta que están ahí. Es probable que algunas personas a nuestro alrededor ya hayan establecido sus propios límites, y está bien para ti que puedas agregar cosas a esas relaciones o cambiar algunas cosas que hoy en día consideras no te benefician o ya no son aceptables.
Al hacer este ejercicio de mejoramiento de los límites te ayudará a sentirte más seguro y confiado, podrás reconocer que sí eres capaz de establecerlos, aun cuando haya sucedido sin darte cuenta, pero ahora eres capaz de mejorarlos y ponerte como prioridad.
9. Sé tu mayor apoyo y la fuente de compasión
Para que los límites tengan una base sólida, debes mostrarte un poco de amor y compasión hacia ti mismo. Recuerda que al venir de ambientes en donde los límites no eran importantes o no tenías un buen ejemplo de ellos, lo más seguro es que también estés trabajando ya en tu amor propio y en desarrollar una actitud más compasiva para ti mismo.
Por lo tanto, en este proceso de establecimiento de límites, es esencial el mantener esta actitud compasiva para ti msimo. Te decía anteriormente, que no podemos esperar ser excelentes en establecimiento de límites y su comunicación si nunca lo hemos hecho o si nunca tuvimos un ejemplo de ello.
El priorizar actividades que te hagan sentir bien y en cuidar de ti mismo te ayudará también a conectar contigo y desarrollar este ambiente interior que te apoya para lograr sentirte que vales y mereces ser feliz y sentirte pleno.
10. Ten una mentalidad abierta
Uno de los conceptos que mas me han servido en mi viaje de sanación es el desarrollo de una mentalidad de curiosidad compasiva. Es decir, reconocer por qué me estoy comportando de determinada forma o por qué reacciono como lo hago o por qué tengo ciertas ideas o creencias. Pero al hacerlo mantengo esta apertura hacia mi misma de que la forma en la que se vea es solo el resultado de algún tipo de herida emocional o problema de apego o algún trauma emocional y mi sistema nervioso solo está reaccionando de forma natural.
Cuando lo vemos desde esta perspectiva nos da una apertura hacia nosotros mismo de entendimiento y abre las puertas al amor y la compasión.
La compasión, el entendimiento y el amor son la base de la creación de un ambiente que nos ayuda a hacer un cambio profundo, una sanación de todas las heridas guardadas en nuestro subconsciente y finalmente liberarnos de lo que nos limita para tener mejores relaciones personales y límites saludables.
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